PREBIÓTICOS Y PROBIÓTICOS
“Los alimentos pueden ser modificados para que contengan ingredientes
que sean funcionales; en esta dirección, en los últimos años han surgido unos
nuevos conceptos: los prebióticos, los probióticos y los simbióticos.”
La flora del colon constituye un ecosistema donde
muchas especies distintas participan de ciclos vitales interrelacionados o
interdependientes, en un ámbito de gran biodiversidad. Unas especies viven de
los productos generados por otras, y a su vez la actividad metabólica de las
primeras beneficia la proliferación de terceras. Las bacterias de la flora
están adaptadas a su hábitat, porque están asociadas con la vida del hombre
desde hace milenios y han evolucionado junto con él.
Debido a la plasticidad de la microbiota intestinal, el uso de
determinados componentes como prebióticos y probióticos puede modular el
ecosistema intestinal humano para mejorar la salud del individuo.
PREBIÓTICOS
Se denominan prebióticos a los componentes
alimentarios o suplementos de la dieta, basados fundamentalmente en
carbohidratos, que no pueden ser digeridos ni absorbidos durante su paso por el
estómago o incluso por el intestino delgado, y alcanzan el colon prácticamente
intactos, estimulando selectivamente el crecimiento y/o actividad de uno o más
tipos de bacterias en el colon (principalmente Lactobacilos y Bifidobacterias),
las que tiene a su vez, la propiedad de
elevar el potencial de salud del hospedero.
Para que una sustancia (o grupo de sustancias) pueda
ser definida como tal debe cumplir los requisitos siguientes:
- Ser de origen vegetal.
- Formar parte de un conjunto muy heterogéneo de moléculas complejas.
- No ser digerida por las enzimas digestivas.
- Ser parcialmente fermentada por las bacterias colónicas.
- Ser osmóticamente activa.
Así mismo, según otros autores,
el concepto de prebiótico exige tres criterios:
- Que sea resistente a la acidez gástrica e hidrólisis por las enzimas del hospedador y resistente a la absorción gastrointestinal.
- Que funcione como sustrato para la fermentación por los microorganismos presentes en el intestino humano y que son bacterias potencialmente benéficas del colon (principalmente Lactobacilos y Bifidobacterias).
- Que estimulen el crecimiento y/o actividad de las bacterias intestinales asociadas con una mejora en el estado de salud y bienestar.
Los prebióticos son fundamentalmente
fructooligosacáridos y galactooligosacáridos (formada por moléculas de galactosa,
los más frecuentes en el mundo vegetal son la rafinosa, estaquiosa y verbascosa
y se encuentran principalmente en legumbres), además, incluida en este concepto
se encuentra la fibra dietética (sustancias de origen vegetal, hidratos de
carbono o derivados de los mismos (excepto la lignina) que resisten la
hidrólisis por los enzimas digestivos humanos y llegan intactos al colon donde
algunos pueden ser hidrolizados y fermentados por la microbiota intestinal),
inulina, lactulosa.
Efetos de los prebióticos en la salud
Los prebióticos más estudiados
son los fructanos, entre los que se encuentran los fructooligosacáridos (FOS) y
la inulina; se encuentran presentes en vegetales como la cebolla, el ajo,
espárragos, alcachofas, raíz de achicoria, tomates plátanos, habas, etc.
FRUCTOOLIGOSACÁRIDOS (FOS)
Los fructooligosacáridos o
fructanos son oligopolímeros formados por la unión de una cadea beta – 1,2 de
D-fructosa a una unidad de D-glucosa. Los principales fructooligosacáridos son:
- 1 – kestosa
- Nistosa
- 1- β – fructofuranosilnistosa
Pueden ser producidos por
bacterias, hongos y plantas, quienes presentan la enzima fructoiltransferasa,
la cual, se encarga de la síntesis. Son fuentes de FOS el banano (6,0 mg/g),
ajo (10,3 mg/g), alcachofa (286,2 mg/g), cebolla (47,7 mg/g), entre otras.
INULINA
PROBIÓTICOS
“En
1989 Fuller define de
esta manera el término probiótico: un complemento alimenticio a base de
microorganismos vivos y vitales que produce efectos beneficiosos sobre el
organismo animal, mejorando el equilibrio microbiano intestinal”
Los probióticos se definen como
ingredientes microbianos de los alimentos que afectan de forma beneficiosa a la
salud del individuo que los consume, mejorando el equilibrio de la microflora
intestinal. Las bacterias probioticas utilizadas en alimentos, por ejemplo,
deben ser capaces de sobrevivir al peso por el aparato digestivo y proliferar
en el intestino. Principalmente se utiliza Bifidobacterias y Lactobacilos; se
las conoce como Bacterias Ácido Lácticas (BAL) por su capacidad de convertir
los hidratos de carbono en ácido láctico y pueden ser homofermentativas o
heterofermentativas. Algunos microorganismos probióticos son:
- Lactobacilos: Lactobacillus acidophillus, L. casei, L. fermentum, L. rhamnosus, L. plantarum, L. vulgaricus.
- Bifidobacterias: Bifidobacterium longum, B. adolescentes, B. animalis, B. infantis, B. bifidum.
- Estreptococos: Streptococcus salivaris, S. faecium, S. intermedius.
- Sacharomyces boulardii.
Las características que deben tener
las bacterias probióticas deben ser:
- Seguridad biológica: no deben causar infecciones.
- Capacidad de ser toleradas por el sistema inmunitario del huésped.
- Capacidad de resistir los ácidos gástricos y las sales biliares, para que puedan llegar en grandes cantidades al intestino.
- Capacidad de adherirse a la mucosa intestinal y de colonizar el segmento gastrointestinal.
- Sinergia con la microflora endógena normal.
- Efecto barrera: capacidad de producir sustancias que tengan una acción trófica sobre el epitelio de la mucosa intestinal.
- Capacidad de potenciar las defensas inmunitarias del huésped.
Los probióticos tienen el potencial de brindar
beneficios muy importantes a la salud humana. Un enfoque crítico y adaptado
para la evaluación de seguridad puede asegurar que tales beneficios sean
asequibles para los consumidores.
SIMBIÓTICOS
Los simbióticos cse definen como
una mezcla de probióticos y prebióticos destinada a aumentar la supervivencia
de las bacterias que promueven la salud, con la finalidad de modificar la flora
intestinal y su metabolismo.